lunes, 17 de junio de 2013

Dormir cuando hay que dormir

Si te pones nervioso y no dormís sos especial.

Yo soy especial - no como rafa gorgory, pero casi - por ende no duermo cuando tengo alguna actividad que sale de mi rutina y supuestamente me genera algún tipo de desafío o prueba.

Anoche fue el caso y me dediqué toda la noche a dar vueltas, mirar el reloj, mirar por la ventana. A continuación bajé la persiana, la subí un poco más y a la cama otra vez.

Nada en ese momento funciona.

Generalmente intento pelear con lo que sea que tengo entre el pelo y mí mandíbula y busco hacerle entender a ese pedacito de materia gris que ambos necesitamos cerrar los ojos.

-----------------  DESTACADOS QUE NO VIENEN AL CASO ----------------------------

Al margen del tema insomnio, ya que hablé de mi quijada debo admitir que ella se dio cuenta esta semana que mi maxilar hace mucho ruido y así le sumo una nueva excentricidad a mi cuerpo


----------------- VOLVIENDO AL TEMA CENTRAL --------------------------------------
No sucede.

Creo que no vaya a suceder nunca.

Entonces me acostumbré. Miro todo a mi alrededor, pienso lo que tengo que hacer al otro día y doy dos vueltas más en la cama.

Cuando me dí cuenta que me dormí es porque ya estoy despierto.

En mí último vistazo al reloj los números digitales del reloj indicaban las 4 de la madrugada.
Ya son las 7 y estoy en la compu. Una vez despierto me propongo rápidamente ponerme nervioso con cosas que no van a servir para ese momento que estoy esperando.

Hoy creo que voy a dormir. Al final no era para tanto. Después de que pasa ese momento me doy cuenta que soy un pelotudo, pero bueno me parece que algún día voy a entender que hay que dormir cuando hay que dormir.

Si vuelve a pasar sé igual que voy a tener con que entretenerme.  

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