viernes, 31 de mayo de 2013

Recalculando

Hoy no tenía ganas de escribir. Lo hago igual. Intento hacerme entender, no tengo ganas pero se que quiero escribir porque creo que me hace bien y sacó algunas cosas para afuera.

Sin ganas, con ganas, poco importa porque no cambia lo que uno siente. Solo sirve para sacarlo afuera. Estoy caliente, re caliente. 

Tiras la caña en todos lados y lo único que encontras son farsantes y mentirosos que no valoran esos años que vos te rompiste el orto laburando barato, calladito y gratarola. Si GRATAROLA, acordate de eso champion one.

Entonces lo único que importa es comer con esos amigos que te hacen acordar de buenos momentos, que saben quien sos y que confían en que algo va a aparecer.

De esa semana que todo era euforia, viajes, reuniones y llamadas a otras provincias, hoy no queda nada. Silencio de radio. Se escucha de fondo RECALCULANDO.

Sí, me hago el filosofo barato porque se me canta.

Miro a mi perro que me mira, mientras miro una serie pedorra que terminó hace mucho y pienso y miro todo eso que tenía pensado para este año que de a poquito se va cayendo.

Qué quiero? Hoy solo quiero llegar a la noche y ver eso que dije en el cierre del MOMENTO RENGOLAY. Solamente eso hace que me olvide como estaba hace dos meses y como estoy hoy. 

No me quejo, es que la psicologa es cara y esto gratis.

Cheers para todos.


jueves, 30 de mayo de 2013

Rapiditas con queso (2)

Mi viejo chocó "mi'' auto. El hombre hace seis meses perdió el suyo luego de fundirlo. Para él es como perder un testículo o las piernas. Hay que llevarlo o prestarle el auto todo el tiempo. Lo bueno es que te quiere enseñar otra vez todas esas cosas que no le prestaste atención cuando tenías diez y te subías al auto por primera vez.

Estacionar con él al lado es tan gratificante como agarrarse el dedo con la puerta. Igual se lo quiere así. No lo vamos a andar cambiando con cincuenta años al buen hombre.

Mi viejo me chocó ''mi'' auto. ''No le hice nada gordo - me dice así desde chico porque estaba para cuestión de peso infantil pero lo disimulaba con el tamaño de la cabeza - fue una pavadita'' y se caga de risa vilmente. 

Si se lo hacía yo al auto suyo me hacía una zapatería en el culo en forma inmediata. 

(Che pibe en el título pusiste rapiditas. Cuando la vas cerrando la historia pedorra del auto chocado?) Gracias por hacerme acordar. 

Cierro con algo que se va abriendo - no es una metáfora - MI BILLETERA. Hoy voy sin falta a lo de mi chapista que es ucraniano. Chupate esa mandarina papito, el pibe tiene chapista internacional, así me lo deja también.

до побачення (adiós en ucraniano)

miércoles, 29 de mayo de 2013

Él es...

Supongamos que el Rengolay es una persona que ya esta en edad de jubilarse, unos sesenta y pico de años. Piensen en cualquier profesión. La que se les ocurra. En verdad no importa, porque para explicar el caso voy a elegir la profesión que a mi se me canta (para cagarme a trompadas por hacerme el vivo en este espacio pueden pasar por casa en horario de oficina).

Digamos entonces que el Rengolay es albañil. 

Comenzó esta profesión de muy chico y en la actualidad conoce todos los trucos y vicios de la misma. Profesionalmente tal vez sea uno de los mejores. El problema es que después de tanto años ya no está para seguir haciendo revoques ni encadenados. Él quiere sentarse a tomar un mate y explicarle al resto lo que deben hacer. De vez en cuando, depone esta actitud y se presta a realizar alguna obra monumental de la cual luego discutirá largo y tendido con los arquitectos porque suprimieron su creatividad. 

Para mi éste hombre no tiene maldad. Es un buen tipo. El tema es que está cansado y muchas veces no sabe para donde encarar, entonces ahí comienza lo que hace unos días explicaba: EL MOMENTO RENGOLAY. "Hago todo yo. Siempre quieren que haga los revoques. Mis compañeros no hacen nada. Vos pibe cuando vas a ir a trabajar a una obra como la gente. Te falta aprender un montón" etc. En esta linea de pensamiento caen también temas como matrimonio igualitario, respetar señales de tránsito, opiniones personales sobre el clima y la apariencia de las chicas que pasan por la vereda. 

Insisto, él está cansado pero muchas veces no sabe de que y es por eso que por momentos todo le cae mal.

Después de tantos años en la construcción, me parece que al Rengolay no le gusta mucho lo que construyó para él mismo.

Mientras tanto espera jubilarse para seguir levantándose temprano e ir a tomar mates a alguna obra cercana. 

Porque él no conoce otra vida y por más que insulte, mande a la mierda o critique él no puede vivir fuera de ella.

ESTA ES PARA VOS (en el sentido que le guste al que le corresponda): Cuento cosas. No son biografías. Estamos de acuerdo no?     



 

martes, 28 de mayo de 2013

Rapiditas con queso

Soy muy con cagón las agujas. Nunca me gustó sacarme sangre. Resulta que me quiero hacer una tatuaje.
Ya se como quiero que sea. Solo me falta hacérmelo. 

Un impedimento SOY CAGÓN, MUY CAGÓN o como me dijeron hace unos días PUSSY.

Cuestión que me lo voy a hacer, ya lo decidí. Tengo que dejar de mentir, paso lejos del lugar donde me lo quiero hacer para no poner excusas pelotudas.

Juro que me lo voy a hacer. Mírenlo 


El momento Rengolay

El MOMENTO RENGOLAY es un estadio mental/emocional del día, la semana o la vida en que uno ve todo lo malo a su alrededor. No voy a explicar el porque del titulo pero más adelante prometo hacerlo.

Ayer tuve un MOMENTO RENGOLAY. Tenía que contactar a una persona por teléfono para hacer un negocio juntos y éste individuo decidió no atenderme en todo el día. Probé dos veces a la mañana y dos veces más por la tarde. En todos los intentos dejando un correo de voz explicando quien era yo y que quería. Soy consciente de que no le estaba ofreciendo salir con una AK47 a robar diamantes en África con Leonardo Dicaprio, pero sentía que merecía una mínima respuesta. Respuesta que NUNCA llegó y ahí afloró mi MOMENTO RENGOLAY del día de la fecha: ''A ver campeón mundial de arqueria con obstáculos tan difícil es apretar el botón verde y decir hola?'' 

Ustedes dirán y qué carajo pasó nene que me estoy aburriendo? Eran las 17:10. El estadio mental y emocional se desarrolló de la siguiente manera: pasó un chico en bici con el semáforo en rojo y lo insulté, un hombre con su perro suelto y también una puteada, un automovilista dobló sin poner el guiñe y también adentro de la bolsa del MOMENTO RENGOLAY. Todos caen en ese preciso instante. Salen a la superficie las más sinceras puteadas y todo lo que tenemos guardado. En ese momento hay que respirar, pensar que no tenemos sesenta pirulos y que todo esta como el culo pero lo podemos enmendar - aunque en la mayoría de los casos no. La realidad es que no podemos ponernos así se tenga la edad que se tenga y ahora se vienen las puteadas de todos los que trabajan todo el día y están más horas afuera que adentro de sus casa. Sepan comprender, los jóvenes con tiempo al pedo y un solo trabajo pensamos así. Cuando era parte del sistema de cobros en caja de ahorro tuve gran cantidad de MOMENTOS RENGOLAY - es más vividos con el mismo RENGOLAY en persona -pero bueno ahora son tiempos diferentes y reprimo éstos sentimientos cada vez que los veo venir.

Finalizando la jornada de ayer, estaba entrando con el auto a un supermercado en donde el ingreso y egreso de autos nunca se respeta. Me costó un poco entrar. Estaba saliendo por mi boca el puntapié inicial de una puteada y dije "se viene un MOMENTO RENGOLAY''. Ella sentada al lado mío se rió - porque conoce la historia que he contado más de una vez - y ahí se acabó todo. Era mucho más hermoso cerrar el día con esa sonrisa que con una puteada. 

  


lunes, 27 de mayo de 2013

Trabajo en familia

La alarma del teléfono hace que me despierte rápido y con violencia - tirin tin tin, tirin tin tin.  Pienso que lo mejor sería levantarse cuando se te da la gana pero hay que hacer que trabajo en algún momento de la semana.

Lejos del trabajo que quiero me conformo, y agradezco porque sino no tendría nada, trabajando con mi viejo y mi hermana. Es algo difícil, ninguno de los tres somos el payaso plim plim y casi siempre hay una puteada con posterior y automática cara de culo que hacen del día laboral una experiencia mucho más divertida. En ese preciso momento comienza una guerra mental que consiste en responder con monosílabos y no prestarle atención al otro.

Como gran parte de mi trabajo se basa en ser el che pibe - porque el chico era super inteligente y estudió periodismo cuando el papa tenía un negocio de camping y pesca - ellos (mi padre y mi hermana a quien alguna vez apodé ''mi padre con tetas'') en algún momento de la jornada laboral van a terminar pidiéndome algo. Fin de la guerra mental. 

Lo más vertiginoso de mi día de trabajo fue hacer un café. Mientras tanto sigo mirando el monitor con cara de concentrado y hago garabatos en un papel que solo tiene escrito los lugares donde me gustaría estar trabajando. 

      

domingo, 26 de mayo de 2013

No me gusta como escribo

No es la primera vez que me siento a escribir pensado que alguien lo pueda leer y le guste las palabras que junto. Hace un tiempo tuve un blog y lo único que hacía era escribir las mismas cosas que los portales de información subían. Contaba hechos que ya todos conocían desde la mirada de un adolescente que poco podía aportar.

No escribí más porque no había nunca una sola repercusión. La realidad era que nunca había entendido la dinámica de la redes sociales - hoy tampoco la entiendo mucho - pero me gusta pensar que si.

El miedo a pensar que todo lo que escribo me parece una cagada hizo que dejara de escribir. Me sentaba y tipeaba algunas pocas frases con una idea básica pero sin sentido, y ahí me di cuenta ''escribo sin sentido pero con ganas''. Tenía que seguir haciéndolo.

Hoy me di cuenta que lo tenía que volver a hacer. Leí, mire, envidié sanamente - lo hacemos todos los que nos faltan ideas - y me decidí. Tengo que escribir. Pero de que escribo? No sé de que pero esto esta abierto y tarde dos horas en decidirme por el tipo de letra asique vamos a llenarlo.

Hay muchas cosas de otras personas que me sirvieron para decidirme y dejar de pensar por diez minutos que no tengo nada para contar o escribir. De hecho hasta ahora no conté nada como para que digan ''puta que interesante este pibe''.

Antes de partir cuento algo. Por hacerme el capo estacionando marcha atrás hice bosta un cesto de la basura con la cola del auto. Esto significan para mi una catarata de puteadas y unos cuantos pesos que hoy no tengo. La cuestión es que si lo metía para adelante hubiera sido lo mismo, pero la abuela miraba y había que demostrar que el pibe sabía. No sabe una nada, vamos a ver si aprendí a escribir o si logró mantener la atención de los que pasen.

ESTA ES PARA VOS (en el buen sentido): Mama no podes comentar, no es facebook acá si me da vergüenza